Comerciante de Coro propinó golpiza a un obrero delante de su hijo de cinco años

Acudió al Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas para formalizar la denuncia y esperar por el estudio médico forense. También fue a la fiscalía del Ministerio Público, confiando que los funcionarios de estos órganos receptores de denuncia atiendan «su reclamo sin que el dinero incline la balanza a favor del agresor y sea privilegiado en un caso que incluye amenazas de muerte hasta para los menores de edad», dijo.
El agresor de Jorge Luis Marín Caldera se aseguró a punta de batazos y patadas darle a probar “el sabor” de su venganza, producto de un reclamo que le hiciera el obrero residenciado en Mataruca para que no orinaran en la cerca de su casa a la vista de menores de edad, cuando se dispone a beber licor con sus amigos.
“Él está acostumbrado a hacer estas cosas porque tiene real; me advirtió que me iba a quemar mi casa con mis hijos menores adentro”, denunció Jorge Marín Caldera, quien dijo que el agresor es comerciante -a quien identificó- y tiene una venta de comida rápida detrás de un centro comercial en Coro-, cumpla su amenaza y termine perjudicando a su hijo de cinco años que presenció la golpiza que recibió de su atacante en compañía de otros cuatro sujetos a punta de golpes, patadas y batazos que le produjeron heridas y hematomas en la cara, espalda, piernas y abdomen.
Acudió al Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas para formalizar la denuncia y esperar por el estudio médico forense. También fue a la fiscalía del Ministerio Público, confiando que los funcionarios de estos órganos receptores de denuncia atiendan «su reclamo sin que el dinero incline la balanza a favor del agresor y sea privilegiado en un caso que incluye amenazas de muerte hasta para los menores de edad», dijo.
Asimismo señaló la víctima que su atacante junto a sus compinches, en medio de los efectos del alcohol, dijeron al pequeño de cinco años “no te vamos a hacer nada a ti, pero a tu papá lo vamos a matar y lo vamos a quemar”.
El comerciante acusado de propinar la golpiza al obrero de Mataruca, compró una propiedad desde hace algunos meses, una especie de finca que colinda con lahumilde vivienda de Marín Caldera. El hecho se registró el pasado domingo 27 de mayo a las nueve de la mañana.
Marín Caldera teme pos su integridad y la de su hijo menor. «Fui a poner la denuncia y me tenían una mamadera de gallo. De aquí pa´lante lo que me pase, él es el responsable», señaló.
Fotos/David Zárraga