El cuerpo lo localizó un guardia que estaba destacado en el comando, a eso de las 7:30 de la mañana de este lunes.
La víctima fue identificada como Jairo José Azocar, de 50 años. Su cuerpo presentaba al menos cuatro heridas por arma de fuego. Dos en el rostro y otros dos en el pecho.
Efectivos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) se trasladaron hasta el lugar para hacer el levantamiento del cadáver. En los primeros análisis se determinó que tenía una data de muerte de 10 horas, aproximadamente; por lo que se presume que lo mataron la noche del domingo.
La hija de la víctima, Luisangy Azócar, acudió este jueves a la morgue de Bello Monte para hacer los trámites correspondientes y poder retirar el cadáver. Desde allí contó que la expajera del miliciano, una mujer identificada como Jhoana Yeisee Yánez Colina, figura como sospechosa en el crimen.
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Expareja sospechosa del crimen
Azócar y Yánez Colina tuvieron una relación sentimental durante seis años, y durante ese tiempo vivieron juntos en Sisipa, El Hatillo.
En febrero el miliciano decidió ponerle fin a la relación y se fue de comisión al estado Apure. Sin embargo, a finales de abril regresó y se puso a vivir con una nueva pareja.
Al parecer, Yánez Colina se enteró de que había regresado y lo llamó en varias ocasiones para entregarle varias pertenencias, tal como indicó la hija de la víctima. Azócar y Yánez Colina acordaron reunirse el domingo 1 de mayo en las cercanías del comando donde prestaba servicios. Por eso ella figura como la última persona que lo vio con vida.
Algunos testigos vieron a la víctima discutir con un sujeto que estaba acompañado de una mujer de cabello rojo, que sería Yánez Colina.
Por esa razón, el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) no descartan que se pueda tratar de un sicariato.
La víctima no poseía ni su cartera ni su teléfono a la hora del hallazgo.
Con información de 800 Noticias
