Cuando el gobierno del presidente Nicolás Maduro decretó el estado de alarma, el 13 de marzo de 2020, por la llegada a Venezuela de la COVID-19, al otro lado del mundo se conocía sobre el coronavirus desde hacía tres meses, ya que fue en diciembre del año anterior cuando se reportaron casos de un tipo de neumonía desconocida en la ciudad china de Wuhan.
El 30 de enero de 2020 la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró una emergencia de salud pública de importancia internacional.
Para el momento del decreto, en al menos 114 países se contabilizaban más de 118.000 contagios y 4.290 fallecidos. En América Latina, para febrero de ese año, se había confirmado el primer caso de SARS covid-19, específicamente en Brasil.
El primer caso en la región llevó a gobiernos de varios países a comenzar a aplicar medidas cuarentenas generales, restricción de movilidad y aislamiento temprano de casos sospechosos.
LOS PRIMEROS CASOS CONFIRMADOS DE CORONAVIRUS EN VENEZUELA FUERON LOS DE UNA MUJER DE 41 AÑOS DE EDAD QUIEN HABÍA RECORRIDO EEUU, ITALIA Y ESPAÑA, Y UN HOMBRE DE 52 AÑOS CONTAGIADO POR ELLA.
El 15 de marzo, el presidente Maduro anunció en cadena nacional que a partir de las 5:00 am del lunes 16 se daría inicio a una cuarentena social en las zonas donde se habían detectado mayores incidencias del virus.
Entre las primeras medidas que fueron implementadas figuraron la suspensión de vuelos nacionales e internacionales y el cierre total de las fronteras. Se restringieron los pasos terrestres fronterizos desde Colombia por el estado Táchira y desde Brasil a través del estado Bolívar.
También se implementó el despistaje personalizado casa por casa y se habilitaron hospitales de campaña.
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A partir del 27 de marzo de 2020, se inició una serie de acciones para enfrentar la propagación del virus. A la población se le hizo hincapié en la necesidad de utilizar tapabocas, así como el lavado frecuente de las manos y la desinfección constante de las superficies con las que se tuviera contacto.
A través del Sistema Patria se hicieron encuestas a la población y se atendieron los reportes que comenzaron a hacer los ciudadanos de posibles casos de contagio.
Rusia donó kits de diagnóstico para COVID-19 y especialistas chinos llegaron a Venezuela para trabajar en conjunto con las autoridades locales. Turquía fue otro de los países que colaboró, enviando insumos médicos.
Con información de portales