Basado en la necesidad de la actualización del régimen tributario municipal, la atención al adulto mayor y a las comunidades, y sobre todo en la eliminación de los vicios, se desarrolla la gestión de Superintendencia Municipal Integrada de Tributos del municipio Carirubana (Sumitca) desde el pasado mes de septiembre de 2024, que registra un aumento de la recaudación y contribuyentes.
Javier Peña, especialista en tributos, llegó desde el oriente de Venezuela al municipio Carirubana en septiembre pasado, para unirse a la gestión municipal del alcalde Luis Piña y seguir las indicaciones del gobernador Víctor Clark.
Con seis meses de gestión, Peña cuenta un balance en mano para precisar lo que considera como un éxito: el aumento en la recaudación así como de contribuyentes.
“Tenemos 10.800 contribuyentes registrados. Cuando recibimos Sumitca habían 1.500. Teníamos en inmuebles 200 inscritos y hoy tenemos 4.600 inmuebles inscritos. Apenas 50 vehículos inscritos, hoy contamos con 3.500 vehículos inscritos. No teníamos ninguna publicidad, hoy contamos con 798 contribuyentes en publicidad, es decir, hemos hecho un trabajo con todo el equipo”, destacó el superintendente municipal.
Estas cifras de incremento de contribuyentes redundan en la cifra de recaudación que manejan actualmente. “Recibimos a Sumitca con un promedio mensual de recaudación equivalente a 300.000 dólares. Hoy día, estamos cerrando mensualmente por encima de los 600.000 dólares”, precisó Peña, quien además destacó que al bajar las alícuotas el 55 % Carirubana se convirtió en el municipio con este porcentaje más bajo.
“En todos los municipios del país cobran entre el 4 % y 6 % de licores; nosotros lo tenemos en 2.10 % y 1.9 % la de licores, que es una de las fuentes de ingresos del municipio. Tenemos, por ejemplo, en 0.60 % las (alícuotas) mayoristas y minoristas de alimentos, mientras que en el resto del país están en 2.80 %; es decir, bajamos las alícuotas y aumentamos la recaudación. Esto significa que conectamos a la gente con Sumitca”.
Aumento de recaudación se deriva de tres elementos
Para el superintendente municipal, el año 2025 es “está arrancando muy bien”. Sumitca, con casi un año y medio de creada, ya trabaja en tres elementos importantes que impulsan los resultados positivos en recaudación y contribuyentes.
El primer elemento que se combate desde este organismo tributario es la informalidad. Al respecto, el superintendente Peña detalló que los contribuyentes se iban a la gestión informal, porque “sencillamente no tenían alternativas”.
“Venían a Sumitca y les decían que si no pagaban no se podía avanzar en los trámites o no se podía inscribir, pero ‘por debajo’ si entregan 100 dólares si se le hacía la gestión”.
Por ello, reveló que combaten la informalidad dándole proyección a la institución, para que la gente conozca que las bases de Sumitca son los contribuyentes, y sin ellos no existe.
El segundo factor contra el que luchan es la corrupción. “Toda la gente me decía que estaba loco cuando dije lo primero que voy hacer como acción y como equipo es combatir la gestoría. Hay gestores que son buenos y hacen su trabajo bien, pero hay otros no”.
Peña detalló que, por ejemplo, una licencia de licores en este municipio tenía un costo entre 2.500 y 3.500 dólares; situación que mantenía licencias de licores vencidas y otras retenidas.
“Comenzamos a llamar a los contribuyentes y la mayor sorpresa es que la gente decía: ‘es que no he ido a renovar porque no tengo los 3.000 dólares que debo pagar’”, apuntó.
Ante esta situación, Peña aclaró que la licencia de licores en Carirubana tiene un costo de 66 dólares, y su pago es directo con punto de venta a una cuenta de la alcaldía. Adicionalmente, precisó que la expedición es automática, si se cuenta con todos los requisitos, pero sí tiene algún faltante se le otorga una licencia provincial por seis meses mientras completa los recaudos y formaliza la relación con el municipio.
Desde que se combatió esta práctica, Sumitca comenzó a emitir licencias normalmente, y hoy tiene un registro de 348 licencias de licores. ”La gente viene y se sorprende porque en el momento que llega presenta solicitud, estudiamos el caso y tiene respuesta inmediata” acotó.
A raíz de estas acciones, también se dio una depuración interna de la institución, por lo que más de 20 funcionarios “han tenido que salir” y de esta forma cumplir con la línea institucional de combatir el flagelo de la corrupción.
El tercer elemento prioritario para la gestión de Javier Peña en Sumitca es la atención al cliente. La premisa es entender que esta institución se debe al público: “La gente no viene a pedir, viene a pagar sus tributos. Por lo tanto esta institución tiene que convertirse en la de mejor atención”.
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Las reivindicaciones en las comunidades: aumento de la recaudación
Otro aspecto estructural para el impulso de Sumitca está centrado en sembrar la cultura tributaria, acción para la que se creó la dirección de imagen corporativa y cultura tributaria con el firme propósito de “sacar a Sumitca a las comunidades”.
Peña refiere que aunque la campaña de la cultura tributaria en el país se ha entendido como un golpe al contribuyente, su efectividad se mide por el número de contribuyentes y las cifras que recaudas.
“Como especialista en tributos lo he analizado, lo he estudiado. Medir la efectividad de un servicio de recaudación por la cantidad de ingreso que recaudas es un error. La cultura tributaria es sembrar el valor de la responsabilidad del pago del tributo (impuesto, tasa y contribuciones especiales) para contribuir con los gastos públicos del municipio”.
Basado en esta idea, el equipo de Sumitca incluyó en sus estrategias el traslado a zonas como Santa Ana y Ciudad Federación, en principio. Adicionalmente, acuden a las cooperativas, así como con las pequeñas y medianas empresas.
Sin embargo, el superintendente Peña resaltó en este sentido, que el mayor logro es la atención al adulto mayor, que gozaba de excepciones dispuestas en la legislación municipal.
“En la legislación municipal aparecían las excepciones, no exoneraciones, porque exoneraciones significa que está sujeto al pago y te dejo que no pagues, pero excepción quiere decir que ellos nunca estuvieron sujeto al pago”, explicó.
Por esta razón hoy se suman 4.750 certificados de excepción entregados entre vehículos y propiedad inmobiliaria de adultos mayores.
—Usted menciona un tema importante, el de las pequeñas y medianas empresas, los emprendimientos, ¿han logrado formalizar su situación?
—Las pequeñas y medianas empresas han estado acudiendo, así como los emprendimientos. Lo que hemos hecho es que si tienen deudas anteriores, condonamos esas deudas; en muchos de los casos las hemos eliminado, y si tienen multas e interés condonamos las multas e intereses. Por ello, nos hemos dedicado a que paguen el mínimo tributable y se le ha facilitado la licencia tanto de actividades económicas como licores.
»La propiedad inmobiliaria es algo que ha golpeado mucho al contribuyente de Carirubana porque había un ciclo cerrado en un sistema que se llama Sigesp donde se habían cargado multas e intereses. En algunos casos por ejemplo si eran 1.000 bolívares lo que debía pagar de inmueble ,cuando revisamos debía Bs. 7.000, pero era entre multa e intereses Bs. 6.000 y 1.000 era el capital, es decir el impuesto, eso era un exabrupto.
»Nosotros cambiamos esa realidad. Le presentamos a la cámara municipal una propuesta de incentivos, condonamos el 100 % y bajamos a la mitad el impuesto. Hoy día de 200 inmuebles pasamos a 4.600 inmuebles. ¿Qué significa esto? Que la gente entendió que si le damos incentivos, que si le damos la oportunidad que los puedan regularizar su situación en Sumitca, lo hacen.
La educación también es beneficiada
Desde Sumitca se atendió la situación del pago de impuestos de los colegios y universidades privadas. Al respecto, Peña explicó que estas instituciones legalmente no están sujetas al impuesto debido a su fin. Por ello, explicó: “La educación es de carácter civil, jamás podrá ser mercantil. Lo confunden diciendo que si la compañía anónima ‘tal’ dirige un colegio, es de carácter mercantil. Pues no. Hay que ver el fin, y el fin es el servicio de educación”.
De esta forma, se han entregado certificados de no sujeción a más de 80 instituciones de educación privadas, “que nunca debieron pagar y no hoy en día no están pagando”.
“Nosotros cuando nos comprometemos con algo es porque desde el punto de vista legal tenemos el andamiaje necesario para que cumplamos y lo otro es que lo vamos hacer”.
Javier Peña
Lo que viene en Sumitca
El trabajo de mejora de la atención al cliente y la lucha contra la informalidad y la corrupción en esta institución continúa; a la par de la incorporación y sinceración de los contribuyentes, verificación de declaraciones juradas y de los deberes formales, así como de la educación en el aspecto tributario.
“¿Me declaraste el mínimo? Te voy hacer una auditoría para comprobar que ese mínimo es real, porque si no es real tu me tienes que pagar la diferencia”.
“¿Qué tenemos previsto? Ahorita el 50 % de rebaja en impuesto de inmuebles urbanos y 100 % de condonación de los intereses”, agregó Peña.
De igual forma, también está el tema de los cierres de negocios. En Sumitca, se recibía un promedio de 120 cierres de comercio al mes, “hoy tenemos 12 al mes porque son cierres definitivos y ya no están operando”.
Para lograr eso se ofrecen incentivos que ayudan al comercio a mantenerse abierto. “No me pagues, no importa lo que debas de años anteriores. ¿No tienes para pagar la tasa de la licencia? No importa, me la pagas después, llévate la licencia, pero no cierres. Ese es el mecanismo que estamos utilizando”.
El superintendente municipal tributario resalta que los logros desde Sumitca se redundaron en la reinversión en el municipio. Obras como reparación de fallas de bordes, iluminación, bacheo, atención a escuelas y liceos son posibles entre el aporte de Gobernación y la alcaldía de Carirubana. “Eso nos dice a nosotros que le hemos puesto corazón porque el contribuyente confío en nosotros”.
Resaltó que al cierre de marzo la recaudación debe estar alrededor de los 700.000 dólares; sobre lo que asegura que esto significa “confianza, el sentido común y definitivamente que la cultura tributaria se siembra en valores. Y es lo que nosotros tratamos de hacer. Si tienes un buen trato, tienes respeto, eres escuchado, tu contribuyes a esa cultura tributaria”.
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