Los haitianos protestaron por el aumento de los precios del combustible durante una huelga nacional, en Puerto Príncipe, Haití, el lunes 26 de septiembre.
Los saqueos en Haití este mes provocaron la pérdida de al menos seis millones de dólares en asistencia humanitaria, incluidas 2.000 toneladas de alimentos.
La información la dió a conocer un funcionario del Programa Mundial de Alimentos, mientras la nación caribeña lucha contra los disturbios civiles y la violencia crónica de las pandillas. .
Las protestas estallaron en todo Haití tras el anuncio del primer ministro, Ariel Henry, el 11 de septiembre de un aumento en el precio del combustible, lo que desencadenó protestas y violencia callejera que incluyeron el saqueo de almacenes del PMA.
“En el transcurso de una semana, WFP en Haití perdió un tercio de nuestras reservas de alimentos, ya que dos de nuestros cuatro almacenes fueron atacados, saqueados y saqueados deliberadamente”, comentó Valerie Guarnieri, directora ejecutiva adjunta de WFP durante una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU.
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El gobierno de Haití se movió este mes para recortar los subsidios al combustible, citando su alto costo, lo que provocó indignación en una nación que ya lucha con una inflación récord.
Varios días después de ese anuncio, las pandillas bloquearon la terminal de combustible de Varreux cavando trincheras y llenando las calles cercanas con contenedores vacíos, impidiendo que los camiones de distribución de combustible se acercaran a la instalación.
Las pandillas han estado bloqueando carreteras desde la capital hacia las provincias rurales del país durante meses, alterando las actividades cotidianas en el país y complicando los esfuerzos de las agencias de ayuda para distribuir alimentos a los más pobres del país.
Con información de Reuters
