Se diferencia de la edad cronológica en que esta última está basada en el año de nuestro nacimiento. En cambio, la edad tecnológica hace referencia a las costumbres relacionadas con el uso de la tecnología.
En la historia de la humanidad, los cambios tecnológicos han ido de la mano con los cambios sociales. Los distintos inventos y descubrimientos han propiciado nuevas formas de vida, desde los primeros asentamientos humanos hasta el trabajo en cadena propio de la Revolución Industria.
De acuerdo con los expertos, ahora nos encontramos en la era digital.
Este periodo está definido por el acceso a internet y el auge de los dispositivos electrónicos, que han condicionado y modificado nuestro trabajo, el tiempo de ocio e incluso la manera de relacionarnos.
Sin embargo, no todas las conductas se han visto impactadas de la misma forma ya que los cambios se han dado de manera progresiva.
Este hecho hace pensar que las generaciones más jóvenes tienen una relación con los productos digitales mucho más cercana, han interactuado desde su infancia con smartphones y no conocen el mundo antes de internet.
Por ello se les conoce como nativos digitales. Sin embargo, la revolución digital ha tenido un impacto tan grande en todas las generaciones y ámbitos de la sociedad, que podemos establecer diferentes edades tecnológicas dependiendo de su relación con el mundo online.
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Entonces, ¿qué es la edad tecnológica? Se diferencia de la edad cronológica en que esta última está basada en el año de nuestro nacimiento y aumenta con el paso del tiempo, conforme se cumplen años.
En cambio, la edad tecnológica hace referencia a las costumbres relacionadas con el uso de la tecnología: qué dispositivos se utilizan (computadora, tablet o celulares inteligentes), cuántas horas se pasa delante de la pantalla e incluso hábitos cotidianos que se pueden realizar con ayuda de la tecnología (ver una dirección o estar al día de las noticias).
En definitiva, la edad tecnológica puede coincidir o no con la edad cronológica. De la misma manera que hace décadas la población envejecía más por sus hábitos alimenticios o de actividad física, la actividad asociada a las costumbres en relación con la tecnología puede establecer una edad tecnológica diferente a la cronológica.
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Este test determina la edad tecnológica basándose en los siguientes factores:
- Qué dispositivos se utilizan más. La mayoría de los adolescentes consideran el smartphone una auténtica adicción, que les sirve tanto para estar en contacto con sus amigos como para ver programas de entretenimiento o seguir a influencers divertidos de su generación.
- Tiempo dedicado a internet. El tiempo que se dedica a internet fuera de los horarios de trabajo o de clases afecta a todas las generaciones por igual. Está demostrado que tanto los mayores como los adolescentes pasan una media de 4 horas frente a la pantalla. No es de extrañar que muchas personas se planteen hacer una DESINTOXICACIÓN DIGITAL.
- Redes sociales. Es sabido que Tik Tok arrasa entre adolescentes y jóvenes (aunque cada vez más adultos se unen a los challenges y siguen a tiktokers humoristas). En cambio, Facebook (que nació hace ya casi 20 años) reúne a una comunidad de gente más mayor, cuando esta era la única red social o la más popular. Estar al día con las diferentes redes que surgen, entender sus dinámicas y lenguajes supone una agilidad mental que puede hacer que varíe la edad tecnológica.
Los hábitos de la tercera edad y de generaciones entre los 40 y los 60 años han variado tanto debido al incremento del uso de la tecnología y las redes sociales, que la brecha digital cada vez es menor con generaciones más jóvenes.
Uno de los beneficios asociados al uso de internet por personas de todas las edades es la mejora de las relaciones intergeneracionales y la posibilidad de estar conectados.
Tener internet en casa y utilizar diferentes dispositivos, favorece este intercambio y aprendizaje; sin embargo, también es necesario proteger la privacidad y destinar un tiempo adecuado al uso de nuevas tecnologías.
Con información de: Versión Final