«Celebramos la firma de estos contratos (…) y nos corresponde ahora honrarlos con trabajo», prosiguió el ministro, citado por AFP.
El gigante petrolero Chevron firmó «contratos para la continuación de las operaciones y las actividades de producción» en Venezuela, tras recibir una licencia de Estados Unidos para retomar parcialmente sus actividades en este país bajo embargo, informó la administración de Nicolás Maduro.
«Hemos suscrito importantes contratos para la continuación de las operaciones y las actividades de producción de esta empresa estadounidense, Chevron, que el próximo mes de abril del año 2023 arriba a sus 100 años de presencia productiva en Venezuela», expresó el ministro chavista de Petróleo, Tareck El Aissami, tras la firma en un acto oficial.
«Celebramos la firma de estos contratos (…) y nos corresponde ahora honrarlos con trabajo», prosiguió el ministro, citado por AFP.
Chevron recibió el sábado pasado una autorización del gobierno de Estados Unidos para retomar sus actividades en las empresas mixtas que tiene con Petróleos de Venezuela (Pdvsa), paralizadas en 2020 en el marco de un embargo impuesto para presionar la caída del gobierno de Nicolás Maduro un año antes.
Puede leer: Estadounidenses buscan acceso al petróleo venezolano por Chevron
La licencia, válida por seis meses, fue anunciada después de que el chavismo y la Plataforma Unitaria firmaran en México un acuerdo para gestionar la liberación de 3.000 millones de dólares de Venezuela bloqueados en el extranjero por sanciones, para destinarlos a proyectos sociales.
El gigante energético tiene cuatro empresas mixtas con Pdvsa -Petroboscán, Petropiar, Petroindependencia y Petroindependiente-, que producen en conjunto unos 50.000 barriles diarios de crudo, según estimaciones de expertos.
Chevron va a encontrar empresas productivas
«Van a encontrar empresas productivas, empresas que han sabido resistir a los embates de estas sanciones ilegales violatorias del derecho internacional«, aseguró el ministro. «Estas empresas han logrado el milagro junto a la clase trabajadora petrolera de mantener sus capacidades productivas y seguir avanzando en los planes de desarrollo previstos para cada una de ellas«.
La licencia especifica que la estatal venezolana no reciba ingresos directamente por las ventas de la compañía estadounidense.
La producción de Venezuela, que hace dos décadas era de 3,2 millones de barriles diarios, permanece estancada en unos 700.000 bd este año, según la OPEP.
Con información de 800 Noticias