La Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) incluyó en su base de datos como delincuentes buscados a Héctor Guerrero Flores alias El Niño Guerrero y Josué Santana alias El Santanita, según reportes.
Los sujetos dirigían a la organización criminal Tren de Aragua, desde el Centro Penitenciario de Aragua, ubicado en la población de Tocorón del cual huyeron horas antes de la toma de ese penal mediante la Operación de Liberación Cacique Guaicaipuro.
Ambos tienen una notificación roja de Interpol, que es “una solicitud dirigida a las fuerzas del orden de todo el mundo para localizar y detener provisionalmente a una persona en espera de su extradición o entrega, o de una acción judicial similar”, según rezan los estatutos de la Policía Internacional presente en 194 países.
En el caso de Guerrero Flores, de 39 años de edad, la notificación roja está signada con el número de control A2023/61967, publicada el pasado 23 de septiembre a solicitud de Venezuela.
“Prófugo buscado para un proceso penal. Atención: armado, peligroso, propenso a la evasión, violento”, dice la ficha de Interpol para describir a Guerrero Flores.
Interpol infiere que el delincuente pudiera desplazarse hacia Colombia, Brasil, Perú, Chile, Ecuador o Estados Unidos. Cualquier país que lo ubique está en la obligación de detenerlo y notificarle a la nación requiriente, en este caso Venezuela, para que formule la solicitud de extradición, dicen los estatutos de Interpol.
El Niño Guerrero líder de El Tren de Aragua
Las autoridades venezolanas lograron determinar que a partir de 12 de julio de 2019, Guerrero Flores se convierte en “el líder activo del Grupo Especializado de Delincuencia Organizada Tren de Aragua, el cual es el encargado de dirigir, organizar y financiar a todos los miembros del dicho grupo con el fin de realizar extorsiones, secuestros, robos, y venta de narcóticos en los distintos sectores del Estado Aragua”.
También se le atribuyen los distintos ataques a los comandos de la Policía Nacional Bolivariana, Guardia Nacional Bolivariana y del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas establecidas en esa entidad del centro de Venezuela, dice la ficha de Interpol.
En razón de ello, sobre Guerrero Flores pesa una orden de aprehensión emitida el 17 de febrero pasado según nomenclatura 009-23 del Tribunal 2° de Primera Instancia en Funciones de Control con Delitos Vinculados al Terrorismo, Corrupción y Delincuencia Organizada a cargo del juez Carlos Liendo, según se aprecia en la ficha de Interpol.
El sanguinario Santanita
El nombre de Josué Ángel Santana Peña (El Santanita), de 30 años de edad, también figura en la lista de Interpol, según expediente A3372/42021, donde se lee una descripción similar a la de su socio Guerrero Flores. Con la diferencia de que El Santanita pudiera desplazarse hacia Colombia (Cúcuta), Panamá, Trinidad y Tobago, Brasil, dice la ficha.
En la casilla reservada por Interpol para la descripción del hecho investigado, se refiere que el 01/01/2020, Santana “líder de una banda criminal que opera en la ciudad de Barquisimeto, ingresó a la vivienda del ciudadano Junior José Patruyo Gómez, portando arma de fuego y sin mediar palabras, disparó varias veces sobre el cuerpo de Junior, causándole la muerte de forma inmediata”.
Los medios larenses reportaron en esa ocasión, que ese asesinato ocurrió después del cañonazo 2020-2021, en la residencia de Junior ubicada en la urbanización La Carucieña, sector III, calle 6, Barquisimeto (Lara).
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Al parecer, El Santanita buscaba era a Keiber Patruyo, hermano de Junior, quien es funcionario policial y no aceptó el soborno del delincuente en una alcabala montana en el referido sector barquisimetano, según versión de sus familiares.
Por ese asesinato, El Santanita tiene una orden de aprehensión emitida desde el Tribunal de Primera Instancia Estadales y Municipales en Funciones de Control de Barquisimeto, según expediente KP01P2020000782 del 20 de junio del año 2020.
El Santanita y Guerrero Flores se conocieron en Barquisimeto donde operaban robando carros, cambiando placas de los mismos y desmembrándolos para venderlos por piezas, según investigaciones.
Posteriormente, Guerrero Flores le da alojamiento al Santanita en la cárcel de Tocorón donde lo convierte en uno de sus principales operadores, de acuerdo a informes.
Con información de El Universal
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