El juez Juan Manuel Merchan ha dicho que una vez concluya la selección del jurado, calcula que el juicio tardará por lo menos cuatro semanas.
El lunes empezó el juicio contra la compañía de Donald Trump en un caso penal de impuestos y la primera tarea del jurado es sumamente difícil: seleccionar a un jurado de neoyorquinos que no tengan una opinión fuerte sobre el expresidente.
La fiscalía de Manhattan sostiene que la Trump Organization ayudó a sus máximos ejecutivos a evadir impuestos sobre beneficios como apartamentos libres de renta y automóviles de lujo.
Trump no está personalmente enjuiciado y no se espera que testifique. Pero tanto el juez como los abogados tratarán de no incluir en el jurado a personas que tengan opiniones fuertes sobre el exmandatario, quien es sumamente impopular en su ciudad natal.
En las elecciones presidenciales de 2020, el 87% de los votantes en Manhattan apoyaron a Joe Biden frente a 12% para Trump.
“Creemos que, probablemente, tardará una semana sólida para la selección del jurado”, expresó William Brennan, uno de los abogados de la Trump Organization, al llegar al tribunal el lunes.
“Al final de cuentas, es un simple caso de impuestos, y así es como deberían verlo”, añadió.
El juez Juan Manuel Merchan ha dicho que una vez concluya la selección del jurado, calcula que el juicio tardará por lo menos cuatro semanas.
Puedes leer: Lo que tienes que saber de la segunda vuelta en Brasil
Se anticipa que el juicio se centrará en las declaraciones y acciones de Allen Weisselberg, un ejecutivo de la Trump Organization que en agosto se declaró culpable de aceptar más de 1,7 millones de dólares en beneficios libres de impuestos.
Trump ha tildado la investigación de “cacería de brujas política”. Los abogados de la compañía dicen que ésta cumplió con todas las leyes. De ser hallada culpable, la empresa podría ser multada con más de 1 millón de dólares, y podría tener dificultades en conseguir préstamos y firmar acuerdos.
El fiscal distrital de Manhattan, Alvin Bragg, heredó el caso cuando asumió el cargo en enero. Bragg ha aplicado una estrategia cautelosa con Trump, negándose hasta ahora de imputarlo personalmente en una investigación que lleva ya tres años.
El proceso de selección del jurado podría demorar varios días, especialmente si los candidatos se declaran incapaces de ser neutros. Conseguir un panel de mentalidad abierta, sin embargo, podría ser clave para evitar la anulación del juicio.