El aspirante presidencial opositor, Enrique Márquez, ofreció una declaración el 25 de abril, abordando el panorama político de cara a las próximas elecciones presidenciales del 28 de julio.
Como exrector del Consejo Nacional Electoral, confirmó su compromiso con su candidatura presidencial, disipando cualquier incertidumbre sobre una eventual renuncia.
“Mantenemos nuestra firme decisión de impulsar nuestra alternativa desde la vereda de la oposición, del cambio genuino, rechazando la complicidad y abogando por un país que clama por transformación. No confiamos en este gobierno, en sus acciones ni en su enfoque dentro de un juego electoral sin normas claras”, expresó Márquez.
El representante del partido Centrados dejó abierta la posibilidad de respaldar en el futuro la candidatura unitaria presidencial de Edmundo González Urrutia. “Estamos en los inicios del juego y debemos estar preparados para los desafíos que puedan surgir”.
Abogando por evitar la abstención, el exdiputado instó a la ciudadanía a participar en masa y no quedarse al margen. “La abstención beneficia a Maduro. Es esencial impulsar el cambio político desde una oposición responsable y decidida”, subrayó. Márquez criticó la estrategia de división promovida por Nicolás Maduro en el contexto electoral.
Además, condenó enérgicamente la inhabilitación de María Corina Machado, las restricciones impuestas a Corina Yoris para inscribirse, y las limitaciones en las adhesiones.
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Para concluir, afirmó que nunca sostendría una reunión privada con Maduro, y en caso de hacerlo, sería de forma pública. “Un futuro mejor es inalcanzable con Nicolás Maduro. Su permanencia solo acarreará más problemas; la migración se agravaría. El pueblo comprende que con Maduro no hay perspectivas favorables”, enfatizó Márquez.
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