El Gobierno de Estados Unidos ha sostenido que la resolución aprobada por el Consejo de Seguridad de la ONU, solicitando un alto el fuego en la guerra de Gaza, no es vinculante, a pesar de serlo.
Esta postura, mencionada inicialmente por la embajadora estadounidense ante la ONU, Linda Thomas-Greenfield, fue respaldada posteriormente por varios funcionarios del Gobierno de Joe Biden.
Al ser consultado si cree que Israel acatará un cese al fuego como resultado de la resolución, el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, respondió: “No lo creo”.
“Es una resolución no vinculante”, añadió.
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Al ser presionado para ofrecer más detalles sobre esta postura, Miller reiteró: “Consideramos que la resolución no es vinculante”.
El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional en la Casa Blanca, John Kirby, también mantuvo esta postura en una conferencia de prensa.
“Es una resolución no vinculante y, por lo tanto, no afecta a Israel ni a su capacidad para continuar combatiendo a Hamás“.
La resolución, aprobada con 14 votos a favor y una abstención de EE.UU., insta a un alto el fuego inmediato en la Franja de Gaza, sin condiciones adicionales.
Además, se solicita la liberación de los rehenes en poder de Hamás.
El secretario general de la ONU, António Guterres, elogió la aprobación de la resolución del Consejo de Seguridad y advirtió sobre la importancia de implementarla.
La decisión de EE.UU. de abstenerse y permitir la aprobación de la resolución, tras cuatro intentos anteriores fallidos, generó molestia en el gobierno de Israel y en particular en el primer ministro Benjamín Netanyahu.
El ministro israelí de Defensa, Yoav Gallant, afirmó que no detendrán la guerra mientras haya rehenes en Gaza y señaló que continuarán operando contra Hamás, incluyendo zonas como Rafah, donde residen más de un millón de personas.
Con información de Últimas Noticias
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