Ya se encuentran activas ocho embarcaciones desde el estado Falcón para la exportación de diferentes rubros a las islas Aruba, Bonaire y Curazao (ABC).
A casi dos meses de la apertura gradual de la frontera marítima, el secretario de economía productiva y exportación de la Gobernación de Falcón, Sergio Quintero, los calificó de positivo.
“A partir del mes de mayo, se establecieron los contactos respectivos y las negociaciones con el Reino de los Países Bajos para la reapertura”.
Enfatizó que fue producto de los esfuerzos del gobierno bolivariano encabezados por el presidente Nicolás Maduro y el gobernador Víctor Clark
Recordó que las primeras exportaciones salieron hacia Curazao, luego se sumó Aruba y finalmente se completó el ciclo con Bonaire.
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La actividad ha ido creciendo paulatinamente, cada vez hay más embarcaciones y se incrementa la cantidad de productos.
Pero sobre todo resaltó la regularización de la frecuencia de los viajes.
De hecho Curazao extendió de dos a tres meses el tiempo de estadía de las embarcaciones en el mercado flotante de Punda o el reconocido mercadito de los venezolanos.
“Ya llevamos más de un millón de kilos de exportación de frutas y hace poco salió la exportación de seis toneladas de pescado hacia Curazao”.
En total ya han facturado unos 500 mil dólares, de los cuales se deben repatriar el 20 % de lo declarado.
Lo que representa un ingreso a la República, fuera de la generación de empleos que genera la actividad.
Cada embarcación activa de 15 a 20 empleos directos, más los indirectos con el tema de la movilización de la carga, los centros de producción, los puertos, toda una cadena de valor.
Trabajo de exportación conjunta
Especificó que también se ha exportado productos lácteos, queso duro telita, guayanés, de distintos productores del occidente.
Entre ellos del Zulia, Trujillo, Mérida, Lara, Anzoátegui y por supuesto de Falcón.
Así mismo se ha sumado la exportación de plástico, carga seca y estiman la incorporación del carbón vegetal.
También materiales de construcción, arena, piedra, cemento, ventanas, perfiles de aluminio entre otros.
Dijo que en este momento todo se adecua a la formalización de la relación económica con los parámetros internacionales.
Por lo que los dueños de embarcaciones van poco a poco familiarizándose con los nuevos procesos y los requisitos exigidos tanto migratorios como náuticos.
Embarcaciones a flote
De acuerdo al balance, las embarcaciones grandes con capacidad de 40 a 60 toneladas son cuatro.
Las pequeñas con capacidad para siete u ocho toneladas son tres y para el traslado de pescado es una con capacidad de seis toneladas.
“Hay más frecuencia de viaje hacia Curazao desde el muelle artesanal de La Vela, aunque los tres puertos, Tucacas, Guaranáo y La Vela están operativos”.
Sostuvo que también se están haciendo las gestiones para que zarpen hacia Curazao desde Tucacas.
Quintero aseguró que aspiran llegar a los montos históricos de comercialización, en el que salían cinco embarcaciones de cada uno de los tres puertos.
Lo que representaban de 15 a 20 barcos en el tránsito marítimo.
Mercado a reconquistar
Argumentó que la fluidez dependerá de la recuperación del mercado que conquistó Colombia Costa Rica y República Dominicana con el cierre de las fronteras hacia Venezuela.
Dijo que se trata de un trabajo por parte de los productores y exportadores con el compromiso de asegurar la frescura del producto.
Además de mejorar la calidad del rubro, establecer un precio competitivo y la capacidad de responder a la demanda.
Alegó que es un proceso que tiene complejidad y requiere de tiempo, pero lo importante es que comenzó.
Y ya está generando empleos en los puertos y permiten a productores del estado y del país colocar sus productos.
El funcionario recordó que la actividad exportadora es desarrollada por el sector privado con el acompañamiento del estado para facilitar los procesos.
La formalización de la exportación
Quintero destacó que la reanudación del intercambio ha permitido una formalización del comercio entre ambas naciones.
Esto en cuanto a trámites de identificación de los marinos, la permisología establecida en la legislación venezolana y en el cumplimiento de estándares náuticos internacionales.
“Todos se van adecuando a lo que establece la leyes, Seniat, Sanidad, Insai, etc”.
Asentó que esto permite garantizar la calidad del producto y que los exportadores mantengan sus papeles en regla según los acuerdos.
Dijo que se trata de un proceso de relación económica y naviera, totalmente formal y legal que apunta a la transparencia.
Así como contribuye al sano intercambio con las islas, pues el fin último es el bienestar del pueblo porque hay más fuente de empleos.
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