El Tiempo confirmó que Fernando Botero murió. El antioqueño es el artista colombiano más grande de la historia, falleció a los 91 años tras sufrir complicaciones de salud.
Botero, quien nació en Medellín, rompió todos los récords del arte, como 300.000 personas en el Palacio de Bellas Artes en México o 155.000 en el Museo de Bellas Artes de Bilbao.
La obra de Fernando Botero es inmortal. Fue quien puso el arte colombiano en los escenarios internacionales más importantes del mundo.
De hecho, sus esculturas se imponen en importantes lugares, como en Estados Unidos y Francia.
Las esculturas de Botero sufren un constante e incesante acoso. En Nueva York, Medellín o en Cartagena.
El pene de su Adán, en el Time Warner Center, está desgastado y agotado. Los pezones de su exuberante doncella de Cartagena están condenados a soportar las caricias de todos los turistas que llegan a la ciudad.
En Medellín –como escribió Ana Piedad Jaramillo, directora del Museo de Antioquia– su Soldado romano “es objeto de una extraña devoción. Los turistas se toman fotos tocando el minúsculo falo para encontrar el amor eterno o para aumentar la virilidad”.
Puedes leer: El último álbum de los Rolling Stones contará con estas participaciones
Y los ejemplos se pueden repetir en todos los lugares donde hay una escultura suya. Porque la obra de Botero invita a las caricias y las miradas.
Con información de El Nacional
Otras noticias de interés