El huracán Erin azotó el lunes las islas del Caribe con fuertes ráfagas y lluvias, mientras crece el temor por corrientes de resaca e inundaciones en la costa este de Estados Unidos, incluso sin un impacto terrestre previsto.
En la madrugada del martes, Erin había perdido algo de fuerza con respecto a días anteriores y presentaba vientos máximos sostenidos de 195 km/h, según informó el Centro Nacional de Huracanes de Miami.
En el anterior reporte, eran de 205 km/h. «Erin es probable que siga siendo un huracán mayor peligroso hasta mediados de esta semana», indicaba el informe. «Se espera que el huracán se mueva entre las Bermudas y la costa este de los Estados Unidos a mediados de la semana», detallaba.
El huracán se encontraba a primera hora de la mañana del martes a unos 1.105 kilómetros al suroeste de Bermudas y a 1.240 kilómetros al sur-sureste de Cabo Hatteras, y se desplazaba hacia el noroeste a una velocidad menor de 11 km/h.
El huracán Erin, el primero de una temporada intensa
Erin, el primer huracán de la temporada en el Atlántico norte, se intensificó el fin de semana cuando alcanzó brevemente la categoría 5, la máxima en la escala de Saffir-Simpson, antes de volver a debilitarse. Su magnitud se redujo a última hora del lunes y ahora es un huracán de categoría 3.
«Erin es una de las tormentas más rápidas y de mayor intensidad del registro moderno», dijo a la AFP Daniel Gilford, científico de Climate Central. «Vemos que se ha intensificado por la temperatura cálida de la superficie y esto tiene mucho sentido, pues sabemos que los huracanes actúan como máquinas de calor que toman energía de la superficie del océano, convirtiendo esa energía en vientos», explicó.
La temporada de huracanes en el Atlántico Norte, que se extiende desde principios de junio hasta finales de noviembre, debería ser este año más intensa de lo normal, según previsiones de autoridades meteorológicas estadounidenses.
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La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por su sigla en inglés) mantuvo su previsión de una temporada ciclónica «superior a lo normal», al estimar entre 13 y 18 tormentas tropicales, de las que entre cinco y nueve podrían transformarse en huracanes.
Con información de DW
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