La tasa de junio una vez más fue impulsada principalmente por los precios más altos del combustible y los alimentos frescos.
La inflación en España subió un 1,5 por ciento en junio para llegar al 10,2 por ciento, el nivel más alto desde abril de 1985, informó el Instituto Nacional de Estadística de España.
La tasa de inflación de junio una vez más fue impulsada principalmente por los precios más altos del combustible y los alimentos frescos, con el costo de la electricidad de un 33,41 por ciento más alto que en junio de 2021.
El INE señala que de no ser por los últimos cambios del Gobierno en los impuestos (es decir, la reducción del IVA de la electricidad del 10 al 5 por ciento), el precio de la electricidad habría subido un 52,7 por ciento.
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Los costos de transporte también aumentaron 19,2 por ciento en junio, por mayores precios de combustibles y lubricantes, mientras que los precios de alimentos aumentaron 12,9 por ciento, impulsados por alzas en el costo de frutas, legumbres, verduras, carne, pan, cereales, leche, queso y huevos, aunque cayó el precio de las grasas y los aceites comestibles.
Los precios de la vivienda subieron un 19 por ciento, debido a los costos del combustible, mientras que el costo de los hoteles, cafeterías y restaurantes fue un 7,2 por ciento más alto que en junio de 2021.
Mientras tanto, la tasa de inflación subyacente, que elimina elementos volátiles como alimentos frescos y combustibles, se ubicó en 5,5 por ciento, el nivel más alto desde agosto de 1993.