Un total de 1303 habitantes del sector José Félix Ribas de la ciudad de Coro claman por la ejecución del proyecto de aguas servidas ya aprobado desde hace seis meses.
Las 543 familias que conforman la zona no tiene red de aguas residuales y los pozos sépticos ya han alcanzado el máximo de vida útil, por lo que en su mayoría están colapsados.
La líder del consejo comunal José Félix Ribas, Yanet Gámez, sostuvo que el proyecto contempla cinco calles principales y cuatro transversales.
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“Cuando el ministro Marcos Torres aprobó los recursos, nos informaron que culminarían los trabajos en Caquetío y vendría para acá, pero hasta la fecha no hemos visto nada”.
Afirmó que debido a esta situación la vialidad está hecha de tierra y no se podrá asfaltar hasta tanto no se ejecute la distribución de los colectores y tuberías que ya tienen listo los cachimbos.
Por otra arte, Gámez indicó que la organización comunal consiguió la instalación del sistema de agua potable con la colocación de 400 metros de tuberías para brindarle comodidad a las familias.
Y a través de la VenApp consolidaron la instalación del alumbrado público para iluminar las calles y así asegurar la seguridad de los habitantes.
“Teníamos 13 años que no recibíamos recursos y ahora aprovechamos para cristalizar el desarrollo de la comunidad que ha luchado por mejorar sus condiciones de vida”.
También con el sistema Sinco del Consejo Federal de Gobierno trabajan en la carga de un proyecto para fortalecer el servicio eléctrico debido al desgaste y deterioro de los corta corrientes y tabacos.
Vecinos unidos para acomodar las aguas servidas
Kerlis Córdova, señaló que es necesario que se atienda la situación de las aguas servidas para que no se proliferen enfermedades.
“Debemos ir a mejor, por eso queremos que se concrete el proyecto y así avanzar, también presentamos problemas con la recolección de basura, por lo que hacemos un llamado”.
Especificó que solo una vez por semana pasa el aseo y han tardado hasta 15 días para recoger los desechos, lo que ha provocado reguera por parte de los perros que riegan todo en busca de comida.
Por su parte, Indrig Márquez, agregó sobre la importancia de cumplir con las necesidades de sector, en este caso del asfaltado, porque cuando llueve no pueden transitar.
“Tenemos que sacar las canoas, y las botas plásticas porque el lodo es tremendo, reconocemos que han habido mejoras y también exponemos que falta más por hacer”.
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