Los precios del gas y la electricidad se elevaron 54% el mes pasado, pues los reguladores aumentaron el tope debido al alza de los precios mayoristas.
La inflación en Gran Bretaña alcanzó el mes pasado su punto más alto en 40 años, a medida que la guerra de Rusia en Ucrania hace subir los precios de alimentos y combustibles.
Los precios al consumidor aceleraron a 9% en los 12 meses previos a abril, comparado con 7% el mes anterior, informó el miércoles la Oficina Nacional de Estadísticas. Es la cifra más alta desde 1982, cuando la inflación se situó en 11%.
La noticia seguramente ejercerá presión política sobre el gobierno para que haga algo a fin de aliviar el costo de vida, mientras economistas prevén la más pronunciada disminución en las condiciones de vida de los ciudadanos comunes desde la década de 1950.
Los precios del gas y la electricidad se elevaron 54% el mes pasado, pues los reguladores aumentaron el tope debido al alza de los precios mayoristas. La invasión rusa de Ucrania ha hecho subir pronunciadamente los precios de los alimentos y combustibles.
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El gobierno contempla la posibilidad de reducir los impuestos sobre la renta y entregar subsidios a personas de bajos ingresos, reportó el miércoles la prensa local. Considera además imponerle mayores impuestos a las empresas energéticas que se están beneficiando de los altos precios del petróleo y el gas.
La inflación está subiendo en todo el mundo y Estados Unidos reportó una de 8,3% el mes pasado, su más alta en casi cuatro décadas. Los países de la eurozona desde hace meses han estado batiendo récords de inflación, pero la agencia de estadísticas de la Unión Europea modificó el miércoles su cifra para abril, diciendo que fue de 7,4% y no de 7,5%, de tal manera que la cifra para abril es igual a la de marzo.
Los bancos centrales de todo el mundo han estado tratando de combatir el alza inflacionaria mediante el aumento de las tasas de interés. La Reserva Federal de Estados Unidos este mes elevó su tasa referencial por primera vez desde el año 2000 y sugirió que lo volverá a hacer, mientras que el Banco de Inglaterra ha sido aun más agresivo: ha aumentado las tasas cuatro veces desde diciembre, hasta llevarlas a su nivel más alto en 13 años.