Mientras la ofensiva de los Reales intenta salir de su bache, se ha hablado mucho de la necesidad de un batazo clave en un inning clave; y eso hizo el venezolano Maikel García.
La alineación puede hacer todo lo posible por embasarse, mover a los corredores y mantener la ofensiva en marcha. Pero en algún momento, alguien tiene que traer a todos al plato.
Un swing grande puede aliviar mucha presión para una ofensiva que está encontrando su ritmo. Y también puede cambiar por completo el marcador.
El jonrón de tres carreras del venezolano Maikel García hizo justamente eso la noche del miércoles, convirtiendo una desventaja en ventaja. Además, guiando a los Reales a una victoria por 6-3 sobre los Rangers en el Globe Life Field.
Junto con la gran noche ofensiva del martes, los Reales han ganado juegos consecutivos por primera vez desde el 18 y 19 de mayo en San Luis y San Francisco. Es la primera vez que ganan partidos seguidos ante el mismo equipo desde el 5 al 8 de mayo, cuando barrieron una serie de cuatro choques contra los Medias Blancas.
Después de que Jonathan India pusiera a los Reales en el marcador con un sencillo impulsor, García llegó al plato con corredores en segunda y tercera y un out.
Un vuelacerca proyectado por Statcast de 407 pies hacia el bullpen visitante — batazo que es casi atrapado por el receptor/estratega del bullpen, Allan De San Miguel — convirtió una desventaja de una carrera en una ventaja de dos.
“Parece que tiene hielo en las venas”, dijo Bubic sobre García. “Está hecho para esos momentos y nada lo altera. Que ellos me hayan respaldado así, quise devolver el favor y mantener la ventaja para nosotros.
“Maikel y el resto del grupo… fue enorme”.
García afirmó que no estaba buscando conectar jonrón. Su intención era alinear la bola por el centro y remolcar a India desde la tercera base. Pero Corbin le lanzó un sinker con dos strikes adentro en la zona, y García lo desapareció.
Los números de Maikel García
El antesalista está poniendo argumentos para ser convocado al Juego de Estrellas con la consistencia que ha mostrado este año. Su promedio de .318 y porcentaje de embasarse de .377 lo ubican segundo entre los antesalistas de la Liga Americana, sólo detrás del dominicano José Ramírez de Cleveland (.319 y .377, respectivamente). Su slugging de .500 es el tercero más alto, detrás de Ramírez y del quisqueyano Junior Caminero de Tampa Bay.