La circulación de la subvariante XBB de ómicron de la COVID-19, está detrás del incremento de los casos en Singapur.
“La pandemia todavía no ha terminado”, alertó este viernes un funcionario de la Organización Mundial de la Salud (OMS), diciendo que la aparición continua de subvariantes “representa un riesgo de recaída y saturación de los sistemas de salud”.
Babatunde Olowokure, director de Seguridad Sanitaria y Emergencias de la OMS para el Pacífico Occidental, dijo que Singapur y Nueva Zelanda están registrando repuntes en el número de contagios por COVID-19; mientras que Filipinas, República de Corea, Japón, Mongolia y Vietnam han mostrado una disminución sostenida de casos, hospitalizaciones y muertes desde agosto.
Olowokure señaló en rueda de prensa que la circulación de la subvariante XBB de ómicron de la COVID-19, está detrás del incremento de los casos en Singapur, mientras que la BA.5 sigue siendo la variante dominante en Nueva Zelanda.
“Singapur ha impuesto de nuevo medidas de seguridad sanitaria para el público como limitar el número de visitas en los hospitales y residencias dedicadas al cuidado de las personas”, observó.
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Los datos de la OMS muestran que el número de casos confirmados de COVID-19, en la región del Pacífico Occidental, superó los 92 millones, incluidos más de 270.000 fallecimientos desde que esta enfermedad altamente infecciosa y mortal surgió en 2020.
Olowokure manifestó que la reducción de casos en varios países se debe a la “relativamente elevada cobertura de las vacunas”, pero instó al público a mantener la vigilancia a pesar de la disminución de los contagios tanto a nivel regional como a nivel global, agregando que el coronavirus sigue circulando en la región.