La presidenta de Perú, Dina Boluarte, rindió los últimos honores de Estado al exmandatario Alberto Fujimori en el palacio de gobierno el sábado, antes de que el féretro partiera hacia un cementerio en el este de Lima.
A pesar de haber sido opositora de Fujimori en el pasado, la mandataria lideró en silencio el breve homenaje en el patio principal de la sede del Ejecutivo peruano.
El féretro, cubierto con la bandera nacional, fue llevado en hombros por una cuadrilla de seis portadores y escoltado por un batallón de caballería de los Húsares de Junín, quienes forman parte de la guardia presidencial.
Durante su recorrido hacia el palacio presidencial, numerosas personas saludaron el cortejo con banderas y expresiones de apoyo a Fujimori, quien falleció a los 86 años después de un tratamiento de cuatro meses contra un cáncer de boca.
La ceremonia en el palacio, que incluyó una parte religiosa en el Teatro Nacional, culminó con un toque de trompetas y una salva de 21 cañonazos.
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Tras ser velado en el Ministerio de Cultura, donde miles de personas desfilaron frente a su ataúd, Fujimori fue sepultado en horas de la tarde en el cementerio de Huachipa, en el este de Lima.
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