Las negociaciones fracasaron. El ministro de Economía y Finanzas, Oscar Graham, hizo un llamado para “continuar con el diálogo”.
El Ejecutivo del presidente de Perú, Pedro Castillo, declaró el estado de emergencia en la red vial nacional durante 30 días con “el objetivo de preservar el orden interno”, después de que el sector de transportistas de carga iniciase este lunes un paro indefinido para exigir la “estabilización y medidas para compensar el precio del combustible”.
El decreto, que se publicó en la edición extraordinaria del diario El Peruano, especifica que “quedan suspendidos los derechos constitucionales relativos a la libertad de tránsito en el territorio nacional, libertad de reunión y libertad y seguridad personales, la inviolabilidad de domicilio, y la libertad de reunión y de tránsito en el territorio”.
El ministro de Economía y Finanzas, Oscar Graham, explicó que “luego de tres intensos días de negociación” se alcanzó acuerdo con el gremio de transportistas interprovinciales.
“Sin embargo, no se llegó a acuerdo con los gremios de transporte de carga”, detalló. El titular pidió a los transportistas de carga “continuar con el diálogo”.
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Desde la Unión Nacional de Transportistas (UNT) del Perú especificaron que exigen “costos mínimos obligatorios y restitución del servicio público al transporte de mercancías, el costo de servicios de peaje y restricción de competencia desleal de operadores portuarios a los transportistas de carga”.
Por otro lado, el ministro de Interior, Dimitri Senmache, informó el domingo a la prensa que más de 130.000 policías se desplegarán en todo el país para “resguardar la seguridad”.
“Que la ciudadanía no tenga miedo, la Policía va a resguardar la seguridad y el control. Todas las personas son libres de expresar sus reclamos, son libres de hacerlo, pero lo que nadie tiene derecho es a bloquear carreteras, a violar una norma”,
aseveró.
Se trata de la segunda huelga de transportes de carga pesada que se lleva a cabo durante el Gobierno de Castillo. La última tuvo lugar en abril, cuando los transportistas iniciaron un paro en reclamo por el abrupto incremento de los combustibles y desató un conflicto social que dejó un saldo de cinco muertos.
Con información de RT
