La reactivación comercial con las islas ABC expande el abanico de ofertas con una nueva visión para los negocios.
La reapertura de la frontera marítima y aérea con las islas de Aruba, Bonaire y Curazao (ABC) trajo nuevas propuestas para reafirmar los lazos comerciales.
En este caso, la junta directiva de la Cámara de Comercio del municipio Colina, promueve dos ideas para el fortalecimiento de las relaciones entre las naciones.
Yoselis López como presidenta y Juan Gotopo como vicepresidente incentivas en primer lugar la realización del II Encuentro Empresarial Venezuela y las ABC.
Espacio para que exportadores y empresarios puedan revisar el potencial de intercambio, además de ser una ventana para oportunidades de negocio.
La otra propuesta es con relación a la creación de la Holland House Venezuela, una organización que promueva las inversiones privadas entre el Reino de los Países Bajos y Venezuela.
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Ambos directivos coincidieron en el compromiso que desde la Cámara de Comercio se brinda al proceso de reanudación comercial y turística.
Esto en cuanto al desarrollo del municipio, la generación de empleos directos e indirectos y a la entrada de divisas.
Dijeron que trabajaron permanentemente con las autoridades para retomar las relaciones que por cuatro años fueron interrumpidas, pero de datan de cientos de años.
Un trabajo con perseverancia para volver a las islas ABC
López indicó que para empujar la reapertura de la frontera tuvieron que realizar estudios, análisis de datos y actualización de información.
El objetivo era mostrar un mapa claro del impacto de la acción diplomática en el desenvolvimiento económico del municipio.
Por ello alegó que el equipo sostuvo reuniones con los marinos, lancheros, exportadores y armadores para procurar la sinergia.
Además que vincular a todos los actores con las demás cámaras de Venezuela.
“Se hizo propuesta y seguimiento ante organismos públicos asumiendo estrategias con la mira puesta en resolver el problema. Nuestra visión es de mayor integración”.
En tal sentido afirmó que para el próximo lunes 8 de mayo, cuando zarpen los dos primeros barcos, puedan ver los frutos de tanto esfuerzo.
Dijo que se trata de los últimos escalones del proceso, ahora lo que corresponde es reconquistar el mercado de las islas ABC.
Afirmó que es como empezar de cero, pero con la fe de todo saldrá bien y a favor de la recuperación económica.
También recalcó que en las islas hay muchos actores dispuestos a ayudar a Venezuela para retomar su competitividad.
“Estas embarcaciones estarán en el mercado flotante de Punda por dos meses, toca evaluar la rentabilidad para asegurar la prosperidad de los negocios”.
Siguen las expectativas con Curazao
Sobre el inicio de los zarpes, Gotopo aseguró que todo sigue igual, a la espera de que ya finalmente el lunes 8 de mayo puedan salir a alta mar.
Para este día se tiene estimado la salida de dos embarcaciones, Viejo Nano y Dacximar II.
Sostuvo que las demás barcos están gestionando todos los requisitos que ha solicitado la isla en esta nueva etapa de relaciones comerciales.
Inició el proceso de reactivación con Aruba
Tal como sucedió con Curazao, la isla de Aruba ya abrió la frontera con Venezuela el pasado primero de mayo.
Acto que no implica precisamente que se haya comenzado con al tráfico marítimo.
De acuerdo a las declaraciones brindadas por el marino, Frank Suárez, también la isla tiene su papeleo y trámites a seguir.
Resaltó que las embarcaciones que salen del Puerto de Guaranao, también debe cumplir con la solicitud de amarre presentada por la Capitanía de Puertos.
“Este requisito también dura aproximadamente cuatro o cinco semanas y solo puede ser emitida para los puertos de La Vela, Tucacas y Las Piedras”.
El gobierno de Aruba exige que todos los documentos presentados por las embarcaciones sean avalados por la Secretaría de Exportación del estado Falcón.
Se pudo conocer que esta isla Antillana no exige póliza de seguros.
No obstante, de presentarse una emergencia que amerite la atención médica en un centro de salud, la tripulación deberá correr con los gastos.
Lo que sí es obligatorio es tener vigente los pasaportes, licencias y cédula marina de los oficiales a bordo.
Una de las restricciones bien resaltadas es que nadie de la tripulación, ni siquiera el Capitán, tiene permitido salir del puerto.
Es decir, que las embarcaciones entran a la isla, despachan o cargan, dependiendo del caso, y salen nuevamente a su lugar de origen.