Entre el primero de mayo y el 20 de septiembre de este año, fueron incoados 410 procesos penales contra evasores del servicio militar obligatorio.
Asegurando que los reclutas no serán enviados a la zona de la “operación militar especial” en Ucrania, Rusia comenzó, este martes primero de noviembre, la fase de alistamiento de otoño para el servicio militar obligatorio.
A las filas están llamados 120.000 ciudadanos rusos que son 7.500 menos que en el mismo periodo del año pasado, y el proceso de su incorporación a las Fuerzas Armadas se extenderá hasta el próximo 31 de diciembre.
Durante una reunión con el alto mando ruso, el ministro de Defensa, Serguéi Shoigú, aseveró que “los militares que cumplen el servicio militar obligatorio cumplen tareas de acuerdo con el tipo de unidad a que son asignados, pero no serán enviados a la zona de la operación militar especial”.
Al mismo tiempo, recalcó que los que ya cumplieron su año de servicio militar obligatorio regresarán este otoño a sus casas. El mando militar ruso ha asegurado que los reclutas tampoco serán enviados al territorio de las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk y las regiones de Zaporiyia y Jersón, recientemente anexionadas por Moscú.
Sin embargo, el estadounidense Instituto de Estudio de la Guerra (ISW, por su siglas en inglés) ha advertido de que los reclutas “casi con seguridad serán desplegados en Ucrania en torno a marzo o abril de 2023”, una vez que concluyan su periodo de instrucción.
Según el ISW, el envío de los reclutas podría producirse incluso antes, dependiendo de la situación en el campo de batalla.
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Convocatoria aplazada
El llamamiento otoñal a filas en Rusia comienza habitualmente el primero de octubre, pero este año fue aplazado un mes debido a la movilización parcial decretada el pasado 21 de septiembre por el presidente ruso, Vladímir Putin, para hacer frente a los reveses militares en Ucrania.
El viernes 28 de octubre, Shoigú dio por cumplida la orden del jefe del Estado y anunció que se cumplió el plan de movilizar a 300.000 reservistas, de los cuales 87.000, según afirmó este martes, ya fueron enviados a la zona de la campaña militar en Ucrania.
El llamamiento a filas para el servicio militar obligatorio se lleva a cabo en toda la Federación Rusa, salvo en 25 municipios de 5 entidades federadas situadas en el extremo oriente del país, debido a su situación geográfica y condiciones climáticas.
“La mayoría de los reclutas serán enviados a unidades de instrucción, donde en un plazo de hasta cinco meses aprenderán a emplear armamento moderno y formarán en especialidades militares”, dijo el contraalmirante Vladímir Tsimlianski, del Departamento de Movilización del Estado Mayor General.
Según Tsimlianski, las más de 25.000 comisiones de alistamientos cuenta con todos los elementos para equipar a los reclutas.
Durante la movilización parcial para la campaña en Ucrania, se multiplicaron las denuncias de reservistas sobre la falta del equipamiento más elemental y de que veían obligados a comprarlo con su propio dinero.
Lo que establece la ley
La ley rusa establece que todos los ciudadanos rusos de entre 18 y 27 años están obligados a cumplir el servicio militar, que tiene una duración de un año. La evasión del servicio militar obligatorio se castiga en Rusia con hasta 2 años de prisión.
Entre el primero de mayo y el 20 de septiembre de este año, fueron incoados 410 procesos penales contra evasores del servicio militar obligatorio, según el portal informativo RBC, que destacó que es el mayor número de casos de los últimos 10 años en el mismo periodo.