El presidente del Suma Falcón, Alexis Castellanos, sentencia que la lucha no solo es de los educadores, sino de todos los empleados públicos, quienes exigen salarios dignos.
El sector educativo mantiene su lucha no solo por salarios justos, también por la protección social de los trabajadores y sus familias, así lo afirma el presidente del Sindicato del Magisterio (Suma) en el estado Falcón, Alexis Castellanos.
“Exigimos las mejoras de todas las cláusulas que tiene el contrato colectivo que no solo abarca la parte económica, sino también beneficios como el HCM (Hospitalización, Cirugía y Maternidad) que cubre a los docentes, administrativos y obreros que, en el caso de los adscritos a la Secretaría de Educación le corresponde el Ipasme, institución importante para el colectivo y el magisterio”, subraya Castellanos.
Menciona las cláusulas que se refieren a los permisos y licencias que tiene el personal para justificar sus inasistencias y cualquier situación que se les presente.
Reitera que las organizaciones sindicales y coalición sindical del sector educativo en Falcón, estan luchando y exigiendo lo que está en las cláusulas.
Por lo que para la nueva contratación colectiva, exigen el pago del 280% que les adeudan de la segunda convención, en la cual están estipulados aumentos salariales progresivos.
“Luchamos por las primas que nos inculcó la Oficina Nacional de Presupuesto (Onapre) desde marzo de 2022, y que están en el contrato colectivo: primas geográficas, de profesionalización, ruralidad, asistencia del hogar, entre otras que, antes que llegara el instructivo Onapre y el aumento salarial de marzo de 2022, los porcentajes asignados a estas eran dignos, y luego nos las desmejoraron y otras las suspendieron”, recordó.
En cuanto al aumento salarial puntualiza que debe cubrir la canasta básica que, está por encima de los 500 dólares y dar una calidad de vida a los familiares.
La lucha no solo es de los educadores
El presidente del Suma Falcón sentencia que la lucha no solo es de los educadores, sino de todos los empleados públicos, quienes exigen salarios dignos.
“Como dicen nuestras consignas, nosotros no estamos guarimbeando ni desfilando, sino protestando de forma pacífica por los derechos y reivindicaciones que por ley, justicia y las luchas de los mismos gremios durante años, se han logrado”, manifiesta.
Resalta el despertar de un mesa trabajadora, y así se evidenció en la asamblea informativa del lunes 9 de enero en la plaza Bolívar de la ciudad de Coro, así como en la movilización del lunes 16 de enero.
Al respecto, el sindicalista remarca que las acciones que, han emprendido están amparadas en el artículo 91 de la Constitución que, establece salarios justos.
Alexis Castellanos: “No tenemos tilde político, ni estamos tratando de tumbar el gobierno. Esperamos los lineamientos de Caracas para las actividades a desarrollar. Nos mantendremos en las calles hasta tanto el patrono no se siente y de alguna manera u otra se firme un contrato colectivo justo. Nosotros no queremos bonificación de salario, queremos salarios justos”.
Foto/Juan Yamarte.
Asimismo, el artículo 68 de la Carta Magna que hace referencia a las manifestaciones y en ello, “un pueblo está manifestando por sus derechos y reivindicaciones”.
Insiste que, el sector educativo no ha llamado a paro, sino a jornadas de calle para exigir los derechos y reivindicaciones, destacando el apoyo de los padres y representantes.
“No tenemos tilde político, ni estamos tratando de tumbar el gobierno. Esperamos los lineamientos de Caracas para las actividades a desarrollar. Nos mantendremos en las calles hasta tanto el patrono no se siente y de alguna manera u otra se firme un contrato colectivo justo. Nosotros no queremos bonificación de salario, queremos salarios justos” , sostiene Castellanos.
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“Si no hay políticas económicas, el salario sigue pulverizado”
En cuanto al tema de que las sanciones de Venezuela repercuten para que el Ejecutivo responda a las peticiones de los trabajadores, acentúa que si tienen una parte importante y no se puede negar.
“No obstante, si el gobierno nacional llevara la política desde otro punto de vista esto pudiera cambiar porque no solo depende de factor externo. Si los aumentos de salarios, si el contrato colectivo no viene a la par de políticas económicas, fiscales que puedan detener la parte del incremento de la tasa del dólar, ese esfuerzo que pueda hacer el gobierno será sal y agua”, argumenta.
En este sentido, enfatiza que en el mes de marzo de 2022, cuando fue decretado el último aumento salarial que, ciertamente no cubrió las expectativas, ni la canasta básica, “por lo menos se resolvía algo, pero se desató el dólar y se pulverizó el salario, por lo que se da un ciclo repetitivo donde una de las medidas a las cuales siempre recurren, es disminuir ceros a la moneda”, añade.