El Mundial de Fútbol Catar 2022, una Copa de lectura distinta para la historia, con dilemas sociales, culturales y deportivos por resolver.
Un Mundial con miradas más allá del fútbol es lo que ha sido Catar 2022; la Copa del Mundo que ya tiene a sus 4 semifinalistas, deberá ser leída en la historia como el mundial de los dilemas sociales, la rebeldía sana de jugadores en el campo de juego y la inclinación de las federaciones de fútbol por las causas justas.
En este sentido, la primera razón extra-cancha en la que se piensa cuando se habla del Mundial, es la situación actual que atraviesa la humanidad. El conflicto bélico entre Rusia y Ucrania se hicieron sentir fuera de las canchas con campañas como la de Nuevo Día Corporación de Comunicación Digital que pedía que este no fuese el último Mundial.
Diversidad cultural que implica tolerancia
La diversidad cultural ha sido sin duda el reto más grande para la comunidad catarí como anfitriona de uno de los eventos más grandes, importantes y diversos del mundo, pero también lo fue para quienes como visitantes debían asumir y respetar las tradiciones de su anfitrión.
La agenda medíatica se inclinó más por la “no aceptación” de ciertas costumbres catarís, algunas sacadas de contexto, que daban una sensación de amarillismo y poca tolerancia al mundo árabe.
Sin embargo, tal como señaló la periodista Marion Reimers: “Esta Copa del Mundo se ha convertido en un crisol de cuestionamientos, preocupaciones y encrucijadas”. La posición de Catar con respecto a la homosexualidad que implicó la prohibición del brazalete “One Love” por parte la Fifa, es sin duda un significativo distanciamiento de los valores universales que profesa la sociedad moderna del siglo XXI.
Dato: En Rusia 2018, el activismo Lgbtq+ también estuvo penalizado.
El lamentable episodio con el periodista danés Rasmus Tantholdt, quien fue cortado en pleno directo por varios agentes de seguridad en Catar, quienes incluso le amenazaron con romper la cámara, será un hecho lamentable que dejará a este mundial con la firma de haber violentado la libertad de prensa.
Estadios de sangre siguen siendo un “misterio”
La construcción de los estadios le ha costado a la Fifa su crítica más grande en esta Copa del Mundo. Los obreros inmigrantes que trabajaron en la construcción de los estadios del Mundial, lo hicieron bajo condiciones inhumanas llegando incluso a morir.
El Mundial se celebró en noviembre y en diciembre ya que era peligroso someter a jugadores y aficionados a las altas temperaturas que alcanza Catar entre junio y septiembre. Meses en los que hicieron trabajar a los inmigrantes para la construcción de los estadios.
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Michael Page, directora de HRW en Oriente Medio, explicó que: “Según las propias estadísticas de Catar, hay miles de muertes naturales de jóvenes perfectamente sanos cuando llegaron, es decir, miles de muertes sin explicación”.
Silencio, es lo que ha guardado la Fifa con respecto a la evaluación en materia de derechos humanos sobre la elección de una sede mundialista.
Revolución en la cancha
Los verdaderamente subversivos han sido los cracks del fútbol mundial. Los gestos, jugadas y declaraciones de los jugadores han sido una verdadera revolución en la cancha.
El gesto más viral ha sido el de la selección alemana, que si bien tuvo un pésimo Mundial, dejó un gesto inmortalizado en la historia del fútbol con la famosa pose donde se tapan la boca como signo de protesta.
Las celebraciones de goles siempre han sido consideradas especiales y algunas llegan a ser protestas deportivas que incrementan la rivalidad entre diferentes equipos.
Bukari, el delantero de Ghana, celebró como CR7 en un gol marcado a la selección de Portugal. Una provocación directa al luso.
Achraf Hakimi hizo lo suyo en un momento bastante irónico. El nacido en Getafe, marcó el penalti para eliminar a su natal España. Penalti que marcó y celebró como Sergio Ramos para darle un pequeño mensaje a Luis Enrique quien dejó fuera al central sevillano de la convocatoria .
Messi ha dejado la “protesta celebración” más icónica en lo que va de Mundial. El argentino celebró a lo Riquelme en la cara de Louis van Gaal.
Riquelme tenía una relación tirante con la dirigencia de Boca, encabezada por Mauricio Macri. Luego de marcar un gol decidió celebrar con este gesto a la directiva queriendo decir: “Escuchen lo que valgo”.
Messi celebró de esta manera luego de vencer a Holanda en un tenso partido. El gesto de Messi es un giño directo a van Gaal quien fue entrenador de Riquelme en el Barcelona y cuya relación bastante tensa.
El futuro de la Copa del Mundo
Argentina, Croacia, Francia y Marruecos son los nombres de la posible nueva campeona del mundo en un Mundial atípico. El futuro de la Copa del Mundo, más allá de quien se consagra campeón, deberá considerar temas como: el cambio climático, la igualdad de género, la diversidad cultural y los derechos humanos.
El fútbol, sobre todo en pleno Mundial, más que un deporte es un medio de construcción para el tejido social. El silencio ante la guerra, la explotación laboral y intolerancia no podrán ser jamás valores del fútbol y ninguna disciplina deportiva.