Una serpiente mató a un barí en Perija. Bemardo Yirose, miembro de esta comunidad indígena fue mordido por la serpiente cuando estaba en labores de campo.
Este lunes 30 de enero se registró en la Sierra de Perijá el deceso de Bemardo Yirose, miembro de la comunidad indigena barí.
Este fue víctima de una mordedura de serpiente guayacán, una de las especies venenosas más peligrosas que habita en Venezuela.
Según información proporcionada por el mayor Luis Contreras, el hombre se encontraba en el sector Las Lolas haciendo labores de campo en el momento en que fue atacado por el reptil.
No obstante, fue auxiliado y trasladado hasta una clínica en Machiques para ser atendido y recibir el antídoto, pero salvar su vida no fue posible.
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Enero y febrero son los meses más intensos en cuanto a calor, por lo que las serpientes buscan salir de sus madrigueras y buscar refugio en lugares frescos.
En caso de una mordedura de serpiente, el mayor Contreras recomienda no hacer torniquetes, no hacer incisos en la piel para intentar extraer el veneno, no tomar brebajes, no tomar orine de venado, no medicarse sin consultar a un médico.
Sin embargo, la decisión más sensata es acercarse hasta un hospital.
El único medicamento que sirve para una picadura de serpiente es el suero antiofídico y debe ser suministrado, al menos, en las primeras seis horas después de la mordida.
De lo contrario, la víctima corre riesgo de ser amputado o de morir.