Venezuela rechazó contundentemente la llegada y operación del buque FPSO One Guyana en el Bloque Stabroek, un área marítima en disputa donde Venezuela sostiene derechos históricos y legítimos por delimitar.
En un comunicado oficial, Venezuela califica esta acción, respaldada por el Gobierno de Guyana en colaboración con ExxonMobil, como una transgresión a los principios del Derecho Internacional, que exigen a Guyana “abstenerse de tomar medidas unilaterales en áreas sin una delimitación acordada”.
El Gobierno venezolano denuncia que esta conducta de Guyana refleja un claro desdén por la legalidad internacional y los compromisos establecidos en el Acuerdo de Argyle de 2023, poniendo en peligro la paz y estabilidad regional de manera imprudente.
Se enfatiza que Venezuela no reconoce concesiones otorgadas en esta región y advierte a las empresas implicadas que podrían enfrentar acciones legales. Esto sin reconocimiento alguno sobre los recursos explotados de forma ilícita.
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Se reafirma el compromiso con la paz, pero se asegura que se defenderán con firmeza los derechos soberanos, sin tolerar provocaciones ni imposiciones consumadas.
Con información de Venezolana de Televisión
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