Para mejorar la apariencia de tu piel es recomendable remover la piel muerta; acá te enseñamos como preparar un exfoliante casero.
Conseguir un rostro y una piel luminosa no es tan difícil; sobre todo si tenemos a la mano estos productos que te permitirán preparar un exfoliante casero efectivo para remover piel muerta.
Muchas veces no hace falta recurrir a tratamientos de belleza en cabina porque podemos conseguir buenos resultados con ingredientes naturales que tengamos por casa.
¿Qué es la exfoliación?
La exfoliación física consiste en realizar un suave masaje facial con un producto elaborado con partículas de pequeño tamaño con el objetivo de contribuir a una correcta renovación celular.
El exfoliante sirve para mantener tu piel impecable y también para limpiar y eliminar las impurezas de todo tu cuerpo, además de que mejora su aspecto. Tras una ducha y una buena exfoliación, tu piel estará lisa, hidratada, suave y radiante.
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Prepara tu exfoliante casero
Café molido: Agrega un poco de café a una crema limpiadora. Humedece la piel del rostro y el cuerpo y extiende esta mezcla realizando movimientos circulares. Lávate con agua tibia. Este exfoliante es vigorizante y perfecto para usar por las mañanas en la ducha.
Avena y leche: Mezcla bien 2 cucharadas de leche en polvo y media taza de avena molida. Agrega agua y mezcla los ingredientes. Deja reposar la mezcla por un minuto. Frota la mezcla por el rostro con un masaje ascendente y acaba con una buena ducha de agua tibia. Este es un también un exfoliante casero para el cuerpo ideal para pieles sensibles.
Azúcar, aceite y limón: Un sencillo y eficaz exfoliante facial casero para la piel es el que conseguimos al mezclar dos cucharadas de aceite de oliva, dos de azúcar y media cucharada de zumo de limón. Aplica la mezcla con movimientos circulares, después deja actuar durante unos 10 minutos y retira con agua tibia. El limón actuará como astringente, así que si tienes la piel grasa, este exfoliante es perfecto para ti.
Linaza y miel: Para mantener los codos y las rodillas suaves mezcla 1 taza de miel con 1/2 vaso de agua tibia. Agrega 25 gramos de linaza y mezcla. Pon la pasta en el frigorífico tres horas. Frótate los codos y las rodillas con la pasta y déjala actuar por tres minutos. Lava y ¡listo!
Recomendaciones
- Debemos analizar el grano del exfoliante antes de aplicárnoslo en la cara y probarlo en una pequeña zona del rostro para comprobar que no es demasiado grueso para la piel de nuestro rostro.
- No presiones demasiado, pues tendemos a pensar que cuanta más presión hagamos con el producto sobre el rostro, más células muertas retiraremos, y no es necesario.
- Si tienes la piel sensible presta especial atención a la selección del exfoliante. Recuerda siempre extender el exfoliante sobre la cara húmeda y después utilizar una buena crema hidratante para calmar la piel tras la exfoliación.
Con información de instyle.es