Con marcador de 4-2, el Real Madrid de Ancelotti cayó ante el Girona y tiene la liga más que pérdida.
El Real Madrid sufrió el martes una goleada 4-2 de visita a Girona, cuyo atacante argentino Valentín Castellanos se despachó con un póquer que aseguró la permanencia del conjunto catalán en la primera división de España.
El encuentro en Montilivi arrancó de manera frenética. El Real Madrid pudo ponerse por delante en el marcador en el segundo 30 del choque. Modric se adentraba en el área para meter un balón en el área pequeña, quien con un taconazo estuvo a punto de colar el esférico dentro de la portería de Gazzaniga, pero fue Santi Bueno, quien desvió el balón por la línea de fondo. El elenco de Ancelotti comenzó el duelo con una gran predisposición, disponiendo claramente la posesión del balón y arrinconando al Girona en su propio campo.
Sin embargo, a la primera que el Girona se acercaba al área comandada este martes por Lunin, se iba a poner por delante en el electrónico. Taty Castellanos, tras una gran jugada colectiva del equipo catalán por el costado izquierdo y un centro exquisito de Miguel Gutiérrez ante la defensa adormecida del Madrid, ponía el 1-0 con un remate de cabeza a bocajarro en el área pequeña. Los jugadores del Real Madrid protestaron el tanto del delantero argentino a Iglesias Villanueva por una posible falta en la jugada que precedía al 1-0.
Vinícius, el protagonista
Después del 1-0, Vinícius se erigió como el protagonista de los primeros 45 minutos por ser el jugador más incisivo del Real Madrid y también por las broncas entre el jugador brasileño y los jugadores del Girona y la afición del equipo catalán presente en Montilivi.
Durante la primera mitad, se sucedieron varias jugadas polémicas entre Vinícius y los futbolistas del equipo catalán, que se saldó con una cartulina amarilla para el extremo brasileño después de recibir un pelotazo conscientemente de Santi Bueno. Más allá de que se acercase el empate del Madrid, se produjo el 2-0 del Girona.
Taty Castellanos, el hombre de la noche, marcó el 2-0 tras un pase en largo de Santi Bueno y ganarle el forcejeo a Militao. El Girona pasaba por encima del Real Madrid, que se encontró sorprendido por el planteamiento de Michel y por el ambiente abrumador de Montilivi.
Diez minutos antes de la finalización de la primera mitad, Vinícius recortó distancias en el marcador con un remate de cabeza a un centro preciso de Asensio desde el perfil derecho. Los últimos minutos de la primera parte surgieron sin ninguna acción reseñable de peligro más allá de la polémica que surgieron con Vinícius y los futbolistas del Girona.
Segunda parte
Si el Madrid tenía pensado retomar el vuelo y buscar la remontada, pronto se le iba a fastidiar el planteamiento. En el primer minuto de la segunda mitad, el Taty Castellanos completaba su ‘hat trick’ para firmar una noche redonda. Ancelotti, atónito con lo que estaba viendo de sus futbolistas, movió el banquillo, dando entrada a Camavinga por Nacho en el lateral izquierdo. Aun así, el Madrid apenas lograba aproximarse al área del Girona en uno de los peores partidos de la temporada del conjunto merengue.
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La tarde-noche iba a ser muy aciaga para el Real Madrid, pero completamente mágica para el Taty Castellanos. El delantero argentino le anotaba un ¡póker! al equipo de Ancelotti. El cuarto gol fue con un remate de cabeza sin apenas oposición tras un ‘caramelito’ de Yan Couto desde el perfil derecho. Ancelotti, muy enojado con la imagen de su equipo, efectuaba más sustituciones.
El técnico italiano retiraba a Luka Modric por Tchouaméni para buscar mayor fortaleza y pelear la posesión de la pelota al Girona. Por otra parte, Michel realizaba un doble cambio. El técnico madrileño introducía en el terreno de juego a Stuani por un ovacionado Taty Castellanos y a Valery por Tsygankov.
Reclamo de Girona
En el minuto 77′, los jugadores del Girona y Montilivi reclamaron la expulsión de Vinícius por un empujón a Santi Bueno sin estar el balón en juego. En cambio, Iglesias Villanueva no consideró que dicho empujón fuese motivo de una segunda amarilla y por tanto de expulsión, permaneciendo el extremo brasileño sobre el terreno de juego.
Ancelotti utilizaba su último turno de sustituciones para permutar a Carvajal por Lucas Vázquez y a Mariano por Rodrygo. El propio Lucas Vázquez recortaba distancias en el marcador a los cinco minutos de salir sobre el terreno de juego después de una asistencia y jugada sublime de Vinícius por la línea de fondo. Solo el extremo brasileño estuvo al nivel. Finalmente, el Real Madrid no pudo recortar más distancias, terminando el partido 4-2.
Con información de Onefootball
