El niño Meiker Montaño caminó junto a su familia durante tres meses por la selva del Darién, cargando a cuestas su tanque de oxigeno para poder respirar, pues solo le funciona la mitad del corazón.
Meiker Montaño es el niño venezolano de apenas 10 año que no se detuvo a sus quebrantos de salud y marchó con sus familiares al Darién con la esperanza de conseguir su trasplante del corazón en Estados Unidos.
Meiker caminó junto a su familia durante tres meses por la selva del Darién, cargando a cuestas su tanque de oxigeno para poder respirar, pues solo le funciona la mitad del corazón.
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Junto a 10 familiares atravesó la peligrosa selva, hasta que finalmente logró el cometido: Llegar a Estados Unidos, según reseñó Univisión.
El niño y su familia atravesaron siete países y viajaron en el techo del tren conocido como La Bestia para llegar hasta El Paso, Texas. La travesía del niño duró unos tres meses, donde Montaño cargó a cuestas su tanque de oxigeno para poder respirar.
Niño venezolano que cruzó el Darién
Al pequeño lo acompañaron sus padres, hermanas y otros familiares por la peligrosa ruta del Darién. En total, fueron 11 miembros de la familia que decidieron emigrar por un mejor futuro.
A Meiker solo le funciona medio corazón y ha sido sometido a tres cirugías para aliviar su salud.
La familia relató para diferentes medios internacionales que atravesaron la selva en cinco días. Durante la ruta del Darién, encontraron otros migrantes que le ofrecieron ayuda.
Muchos lo ayudaron a cargar su tanque de oxígeno, incluso en algunos momentos se quedaron sin comida, pero lograron solventar el inconveniente.
Con información de El Carabobeño